Cuando se le presenta una situación difícil, ¿Siente que le falta el aire, suda en exceso, le dan náuseas, le duele el estómago o el pecho? Si su respuesta es sí a todas las anteriores, es probable que esté experimentando ansiedad.
La ansiedad es uno de los problemas de salud mental más comunes en el mundo, afectando a millones de personas en diferentes grados y formas.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), se estima que alrededor del 4% de la población mundial sufre actualmente algún trastorno de ansiedad.
El psiquiatra bogotano Humberto Zuluaga la define como “un conjunto de manifestaciones emocionales que da como consecuencia el sentir: incertidumbre, aprensión, tensión, no saber qué va a pasar”.
Para tratar la ansiedad se recomienda buscar ayuda profesional. Foto: Freepik
De acuerd0 con la OMS, las personas con trastornos de ansiedad suelen experimentar miedo y preocupación de manera intensa y excesiva.
Es importante destacar que experimentar ansiedad es normal en ciertas situaciones, pero cuando se vuelve persistente afecta la calidad de vida, por lo que es necesario buscar ayuda profesional.
“Quizás pueda durar unos días e incluso una semana, pero cuando eso comienza a afectar el sueño, la tristeza o la ansiedad perdura en el tiempo, allí es necesario pedir ayuda y concientizarse de que se tiene un problema”, señala Fernando Collazos, psiquiatra del Centro Médico Imbanaco.
La ansiedad pueden interferir significativamente en las actividades diarias y deteriorar la vida familiar, social, escolar o laboral de una persona.
Sin embargo, existen estrategias y técnicas que pueden ayudar a controlar un ataque de ansiedad cuando se presenta. Aquí te presentamos algunas recomendaciones de los especialistas.
Así puede controlar un ataque de ansiedad
Realizar ejercicios de respiración profunda, cerrar los ojos y visualizar pensamientos positivos ayudan a controlar una crisis de ansiedad. Foto: Freepik
- Busca un lugar tranquilo: Diríjase a un lugar donde esté solo, se sienta cómodo y pueda relajarse. Aflojar la ropa puede ayudar a aliviar la sensación de opresión. Si necesita llorar o gritar hágalo.
- Controla la respiración: Practique ejercicios de respiración profunda, inhalando por la nariz y exhalando por la boca. Busque una posición cómoda, ya sea sentado o recostado, y concéntrese en respirar de manera lenta y constante.
- Visualiza un lugar feliz: Cierre los ojos y imagine un lugar que le traiga paz y felicidad. Piense en cosas positivas y relajantes para distraerse de los sentimientos de ansiedad.
- Realiza alguna actividad que le guste: Dibuje, pinte, escriba, escuche música, practique cualquier actividad que le traiga placer y distracción.
- Utiliza afirmaciones positivas: Contrarresta los pensamientos negativos con afirmaciones positivas y reconfortantes. Por ejemplo, repite frases como “Estoy seguro y en control”, “Este sentimiento pasará”, “Puedo manejar esto” o cualquier otra afirmación que te brinde calma y seguridad.
Recuerde que cada persona puede encontrar diferentes métodos de manejo de la ansiedad que funcionen mejor para ellos.
Si experimenta ataques de ansiedad con regularidad o siente que su ansiedad está afectando su vida diaria, no dude en buscar ayuda profesional.
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